Recuerdo de pequeña haber visto la película “La Cabaña del
Tío Tom” donde los esclavos negros recogían los blancos copos en extensos campos
bajo el sol quemante del día….
Y jamás olvidaré la imagen del cocodrilo
devorándose al que saltó del barco que los transportaba, tiñendo el Mississippi
de rojo horror!...
Volviendo a nuestro transporte, ya está en sus últimos
detalles: las balizas,
la tapa “del baúl”, los espejos, los faros,
el soporte para las monturas,
el famoso “loatamoconpiolín”,
y el no menos “por las dudas”, que no será obviamente para talar árboles ni defenderse de los osos…
Uno nunca sabe… más vale hacha en mano que problema por resolver!
Y seguimos acomodando cajas! Todo con ganchos para ajustarle tensores como en una embarcación, porque el bamboleo será importante…!
-“Estamos arando”- dijo un mosquito, porque la verdad es que
el que está haciendo todo es Bernard, debido a mi “paro forzoso de brazo caído”
derecho con tendinitis por exceso!
Así que acompaño desde mi puesto de matera y escribiente, mientras “las
chicas” esperan ansiosas la salida…..
- Maáaa..... Cuándo nos vamos?....
Que linda foto María!, con el mate presente!
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