Ahorra para un mal día
JARRAH
Resulta más
fácil vivir en el presente si estamos seguros de lo que nos depara el futuro.
Saber que
podemos recurrir a algo en tiempos difíciles, ya sea a nivel emocional,
práctico o financiero, es muy tranquilizador.
Del mismo
modo, el jarrah confía en que cualquier incendio forestal que pueda haber en su
hogar australiano pase muy deprisa y que solo se chamusque el tronco.
Sin embargo,
tiene una póliza de seguros en caso de que pase algo más grave.
Justo debajo
del suelo, almacena una provisión de nutrientes llamada lignotúber, de la que puede crecer otro jarrah en caso de que el
original se muera.
Si los daños
ocasionados son menos graves, el nuevo jarrah también podría brotar del tronco
del árbol original.
Sea como
sea, tiene ahorros en el banco.
De “Sé cómo un árbol” de Liz Marvin e
ilustrado por Annie Davidson.