Bernard se merece 48 hs. de vacaciones antes de arrancar
definitivamente, ya que viene trabajando sin pausa en este Proyecto (que ya es
una Realidad! más que un Proyecto) desde hace largo tiempo….
Amanecimos congelados pero enseguida el sol se dispuso con
todo y disfrutamos de un “veranito indio” como llaman aquí a estas agradables temperaturas.
Como padres de familia numerosa, nos dedicamos a mirar las
travesuras de nuestra prole en la plaza que les cercamos. Ellas felices,
retozaban a sus anchas, literalmente hablando.
En algún momento, se detuvo un auto en el camino y miró
nuestro atípico campamento, algo curiosos. Se acercaron, bajaron, y con cordial
saludo, se presentaron queriendo saber más de nosotros.
Bernard les contó el principio de esta historia: “Erase una vez…. que tuve un sueño de salir a
plantar árboles…”
La gente maravillada quiso conocer los vgones y acercarse a
acariciar a las mulas. Y porqué no? tomarnos unas fotos juntos… desearnos toda
la suerte y despedirnos afectuosamente…
Pues al rato, la escena se repitió con otra familia, y otra…
y más tarde un camionero detuvo todo su gigante acoplado. Por la tarde llegó un
periodista del diario local, grabador en mano.
En algún momento una señora nos regaló una canasta de
frutas, otro señor volvió más tarde con un pollo rotisado, y unas mujeres del
pueblo vecino –donde ya nos esperan para la próxima parada!- nos trajeron unas
botellas de leche de cabra.
No sé si nos tomaron por hippies muertos de hambre,
o es una forma de agasajarnos y darnos la bienvenida en este pueblo.
Durante toda la tarde siguieron las visitas y Bernard se
transformó en el apasionado vocero oficial.
Hasta llegó un presbítero con su esposa y hermanos y al
final de la “charla explicativa con visita guiada”, nos hizo tomar a todos de
la mano en ronda; los caballeros se quitaron el sombrero, y rezó una oración de
bendición para nosotros, para las mulas y
para la protección del viaje… Se
sintió bonito…
Y de hecho, muchos angelitos nos visitaron hoy!...
Que maravillosas vivencias Maria!!! y claro, es obvio que van a despertar la curiosidad en todos los lugares donde vayan y eso comprueba que en los pueblos todos somos iguales y la gente del interior de los EEUU son tan campesinas y solidarios como nosotros. Besos a los dos y A ANDARRR!!!!
ResponderBorrarQue todo salga de lo mejor . Ignacio
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