Tras el
desayuno de “las chicas”,
Luego tocó el turno de desenvolver la bolsa de los
arneses, reconocerlos y dejarlos tomando sol toda la mañana para que se les
vaya el musguito de la humedad, debido al largo tiempo empaquetados.
Luego de una
buena cepillada y lustrada, estuvieron listos para probárselos.
Hubo que medir
todas las cintas, ajustar y aflojar hebillas, para que calzen perfectamente, sin
roces inútiles que les produzcan escaras, ni tan flojas que no sirvieran para
obedecer las órdenes del manejo.
Son onda
mexicanos, cuero negro con chatas plateadas, recool, no?
Les cuento
que tras algunas “pruebas de compatibilidad” entre las mulas –en referencia a
sus tamaños, caracteres de personalidad y habilidades adquiridas- armamos 2
parejas (team) para cada uno de los wagóns, a saber: el botado con el nombre: “Le
Premier fleur de Cotton” irá con Pamplemousse y con Scarlet O´Hara.
El segundo,
llamado “Pourqoui pas?” va con
Moulinette y Loretta.
Baguette y
Valentine son mulas de montar, así mientras van de goma de auxilio atrás, para
rotarlas en caso de necesidad.
A la cola
Super Smart, Smarty para los íntimos, que es cargador. Así que le toca el noble
oficio de llevar alforjas, posiblemente los últimos bártulos que no entren en
los carromatos.
Veremos,
veremos, y ya lo sabremos….
Por de
pronto, hoy Pamplemousse y Scarlet lucieron divinas con sus collares, aritos
(más allá de las orejas), anteojos para el sol, y pulseras hasta en la cola!
Al terminar
de colocarles los atuendos y las
respectivas bijouteries, se nos acercó un angelito a darles la bendición.
Luego a
guardar todo! de vuelta. Bernard, ya rendido de la larga jornada, se calzó al
hombro cada juego que pesa más de 30 kilos!
Imaginen x 4 mulas, dos veces por día (poner y sacar…) otra que
gimnasio!...
Bueno, nos
estamos viendo!
Les mando un beso! Good night!
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